jueves, 19 de febrero de 2009

Historias De Cama


Cuantas cosas pasan en pocos instantes, cuanto quise tirar la toalla al piso y desgarrar tu piel con mis besos, haciendo coloquios estructurales de sonrisas y asaltando el pensamiento pagano y convirtiéndolo en morboso. Eso me paso por la mente cuando vi esta joven que mas bien parecía sacada de una de esas series de animaciones japonesas, todo el esplendor y el cuerpo que pedía ser saciado como lobo hambriento, me decido entonces a buscar su conversación y talvez su afecto, me acerco y digo

- señorita podría sentarme aquí junto a usted deseo comer algo y regularmente lo hago en compañía de alguien, claro esta si no le importa…me mira y extrañada con mi comportamiento dice

- no hay problemas, mientras lee un libro interesante presumo yo porque no presto mas atención que lo que yo esperaba, así que decidí invitarle a comer también bajo el pretexto de que no puedo comer y que la persona que me acompaña no coma. Me mira nuevamente con ojos de pocos amigos

- si encuentra que brindarme no hay problemas, soy vegetariana

- pues de seguro que puedo encontrar que le pueda interesar, así que rápidamente maquine y pensé en alguna pizza de queso o algo similar que no contuviera carne, así logre una conversación mas a fondo donde empecé a compenetrarme un poco mas con ella y quedamos de encontrarnos quizás con todo el morbo de la palabra en una siguiente cita.